Granja a las afueras de Pavia

Me recuesto junto a ellos, y sonrío

-Bueno chicos, os mereceis... No, nos merecemos un descanso

Dentro de poco quedan dormidos olvidándose de todo, la paja era muy cómoda proporcionándoles un largo sueño, nada en especial ocurría un grupo de guardias provenientes de Pavía pasa por las afueras no era raro verlos de ves en cuando.

Dormimos durante horas, tranquilamente, hasta que me despierto. Me desperezo, y permanezco un rato sobre la hierba, hasta que me decido a hablar

-Bueno, chicos... ¿Os apetece cenar?

En ese sitio donde la sombra era cómoda y la paja hacia de cama, nadie se despertaba aunque cuando tus palabras mencionaron "cena" se despertaron rápidamente. De pronto dos sombras se ven moverse, una sale corriendo hacia afuera la otra por otro lado se mueve a paso lento alrededor de ustedes.

-Hola, tiempo sin verles.- Pronto se dan cuenta que era uno de los trabajadores que no tenían pistas, estaban dormidos en el pequeño edificio, al parecer estos dos habían pasado la anterior noche adelantando un poco. Los hombres esperan la cena que les preparas aunque empiezan a venir vientos fríos del norte lo que dificulta estar afuera mucho tiempo sin congelarse del frió.

-Venga, entrad para dentro, chicos, que hace frío... Ahora os llevaré la cena

Entro dentro, y empiezo a preparar la cena.

Todos entran siguiéndote, esperan con ansias la cena sentados. No tenían mucho mas que hacer por lo que poco a poco se dormían esperando que les avisaras.

Vuelvo pronto con la cena, y empezamos a cenar

-Perdonadme, chicos, si he estado algo despótica estos días...

Todos se mueven directo hacia ti dispuestos a cenar. -No hay problema...- Mencionan casi todos al mismo momento. Al rato terminan de comer y cada uno se va a dormir esperando el otro día.

Me voy a dormir, nerviosa, esperando no tener ningún problema al día siguiente...

Duermes sin problemas en la noche, todo pasa muy rápido. A la mañana siguiente los hombres se levanta temprano esperando al dueño de las tierras. Tu aun sigues durmiendo aunque no es tarde en realidad solo que los trabajadores se levantan temprano algo preocupados por la llegada del señor, de pronto llega el otro trabajador trayendo alimentos para cada quien, bien empiezan a comer te levantas.

Me levanto, me visto, y me uno a ellos, empezando a comer

-Está bien, chicos... Hoy, tiene que salir todo perfecto, ¿entendido? Así que ni una queja, ni un solo fallo...

-Quejas, fallos?...- Se ríen preocupados, tras haber terminado la comida y pasado unos cuantos minutos llega el noble a caballo sin nadie mas que le acompañe.

-Al fin les veo levantados malditos holgazanes!.- Grita el noble dejando el trote y bajándose del caballo. -Hermosa Adriana, a simple vista parece que has hecho buen trabajo.- Observa alrededor, de pies a cabeza toda la granja.

Sonrío

-Muchas gracias, señor. Lo que mas me ha costado ha sido, precisamente, lograr que no duerman a cada minuto

Me río

-¿Quiere ver como va todo?

-Claro, no me molestaría que me muestre los nuevos cambios.-

Se acerca a ti esperando que le lleves un poco a ver el lugar.

Le llevo a ver como han reparado las vallas, empezado a cultivar los campos, quitado la maleza, ahora las habitaciones están limpias...

Observa todo lo nuevo. -Me impresiona lo que has logrado hacer... No pensé que podrías hacer algo con todo este pedazo de tierra... Bueno me iré al anochecer veamos como trabajan.- Los trabajadores comienzan a regar y trabajar en los cultivos, por igual trabajan con los animales quitando la lana y ordeñando las vacas.

-También me impresiona lo que has hecho con estos trabajadores, que me han prometido mucho pero nunca han cumplido.- Se ríe.

Sonrío

-Solo necesitan algo de mano dura, y constancia, señor

-Si puede que si...- Se moviliza al edificio mas grande, tal ves se le habrá pasado que tu te hospedas actualmente ahí.

Le acompaño al edificio

-Como vé, me he encargado de limpiar los edificios, que estaban echos una pena...

-Si también le he notado. Espero que la granja apoye a la alimentación de la ciudad... Por ahora prefiero que te sigas manteniendo como administradora de la granja.- Dice levantándose.

Asiento

-Eso está claro, señor. Y acepto su decisión de permanecer como administradora de la granja. CUando usted vea necesario, podrá destinarme a otro lugar...

-Si pero quiero ver como lo llevas a largo plazo. Vendré cada cierto tiempo a llevarme los cultivos a la ciudad, veo que ya tienen algunos así que mañana les enviare a alguien para que los busque.- Pausa y se dirige. -Donde podre descansar?, ahora que lo pienso acá usted duerme. Espero que haya buscado algo o desplazado un empleado...- Se ríe.

Sonrío

-No, no he desplazado a ningún empleado. No soy especialmente tímida, así, que siempre y cuando me prometa no intentar nada raro, supongo que puede dormir aquí...

-Interesante... bueno no prometo nada...- Se ríe. -Dormiré aquí un rato he tenido que viajar un poco así que creo que deseo descansar, algo mas que desee comentar?.-

Sacudo la cabeza

-No, señor, nada digno de mención. Si me lo permite, mientras usted duerme, prepararé el almuerzo.

Salgo de la habitación, y empiezo a cocinar la comida